07 noviembre 2010

Tres fotos, un arcano de ocasión y un hasta luego































Ahora viajo de incógnito por los aires de tus cielos, con los pies en el vacío y el estómago pegado a la boca, intentando no morir cuando encuentro tu sonrisa aferrada a una nube. Es cierto, parece otra cursilería que me cuesta sobrellevar - por idiotismos y otras cosas - pero es que bordear el cielo en la tormenta, al final resulta un absurdo trágico, conmovedor si se quiere, que busca con más o menos desesperanza lo que todos buscamos en este mundo.


Me voy a pasar unos días con mi flia Paulista, los veo luego!