
Pocas cosas he roto – sin intención – que han provocado auto-insulto, al punto casi de flagelarme (lástima que ya pasó Semana Santa!).
Hoy, se me antojó hacer galletitas de manteca – todo por no salir a comprar bizcochos a la panadería- para tomar la leche con algo sólido (alma de pochi!).
Al tomar un recipiente para: “mezclar 100 grs de manteca a punto pomada con 2 tazas de azúcar” , Sic: según el libro del Crandon, “se cae”, sí, se cae solito, el “bol” de vidrio del segundo estante del mueble alto de la cocina!
Porqué? He? porqué? Porqué el mueble es muy alto? No. Porqué soy petisa? Si. Porqué me distraje viendo que la manteca a punto pomada me hablaba? Si. Porqué mis manos son de manteca? Si. Por tanto mis manos estaban a punto pomada? Si.
El silogismo se cumplió tal cual y la Ley de Murphy también!
Estoy hecha una materialista pelotuda........el “bol”!, el que compré en el año 1986! Se dan cuenta?!! Yo me doy cuenta!!! La reliquia de la casa! El del borde rojo.......snif snif.....
Lo peor, fue que se rompió como si hubiera explotado una granada de mano! Salió volando por toda la casa: cocina, terraza, comedor, de modo que el desparramo fue total.
No sabía que mirar y agarrar primero: los vidrios o la manteca a punto pomada o a punto “puteada”!
En fin, limpié todo, bajo una lluvia de insultos que me dirigía una voz........ del más allá ( del más allá de la cocina! por supuesto ) , creo que decía algo como: “ yo te dije, eso ahí no iba a durar mucho! Menos mal que no fui yo!.........pero venía de muuuuuuuuuy lejos insisto, cada vez más lejos.........(cobarde!!!!).
Salieron bastantes, 3 docenas o más, pero a costo de qué? O mejor dicho de quién?
de mi histórico “bol”, que ahora yace en una bolsita de plástico con un cartelito que reza “cuidado vidrios rotos”.
No somos nada! me dije........." Que buenas te quedaron las galletitas!"......me dijo la voz, ahora mucho más cerca.